martes, 15 de febrero de 2011

Otra Taza de Café…o Chocolate.

Otra Taza de Café…o Chocolate.
Todos de rojo, todos de mermelada de fresa, todos tiznados de carmín, todos rompiendo papeles de cortilandia, todos riendo entre aspavientos de alegría forzada, alentada por anuncios de ángeles secretos, que no esconden nada, de rojas blondas minúsculas que suben la temperatura y reparten la sensación de o eres de los nuestros o eres culpable, o doblegas tu tarjeta de plástico en míseras plastificaciones o tu felicidad, no vale.
Tú que sirves el café recién hecho, con ese aroma que ni valdés, en su momento y punto, con todos los aledaños firmados de suculentas galletas regadas con afrodisíaco chocolate y aromas de vainilla. Tú que esmeras tu destreza, con delicadas manos y más sensible cariño, sin ficciones, más que agradar.
Tú que reúnes el torrente de miles de ríos en un solo cauce, que orientas dicho caudal de sensaciones gratas en tu rededor, tú que no dejas que los otros dejen de sonreír por muchas ganas que tengas de no hacerlo. Tú, compañía, tu aliento, tú…
Hoy merecedora de un dulce chocolate entregado por los  Siempre receptores de tus carantoñas. Hoy son ellos quienes diluyen en su pensamiento los fideos de chocolate coloreado. Porque dejas que tu mente se obnubile con difusiones falaces, sin olvidar cada día, sin menoscabo de angelitos sonrosados. Hoy te lleno tu taza de café, como cada día me lo llenas tú a mí. Excusa suficiente para intercambiar nuestras confidencias, nuestros sinsecretos, nuestros logros y nuestras vasijas vacías.
Hoy no cabe lugar para salazones en rostros delicados, pues hoy te paso mis dedos como largas plumas absorbentes de riadas de salitrosos riachuelos, dulcificados por un veneno que recorre mis venas desde hace años ya, desde aquel día que tú me inoculaste con el tácito del amor, ungüento quebrantador de visiones oscuras y clarificador de enfoques lumínicos que refrescan los rostros como al romper instantáneo del efímero momento captado por la veloz flecha que aquel angelillo, que todos quieren culpar de males y parabienes, portador de buenas y malas.
 Sin percatarnos de la gran pirámide que se forma con el transcurso de los años, bien apilados, los recuerdos, las vivencias y la férrea estructura asentada sobre apoyos enristrados componen nuestro edificio por milenios.
Te lleno la taza de café, te pongo otro trozo de tarta de chocolate y degustamos otro bello momento, otro dulce beso, que para decirte esperaba, recibo en mis húmedos labios, intercambiamos el dulce sabor, el afrodisíaco sabor…
Pero bueno…qué haces que las niñas no se han ido aún, que me quitas la ropa, que te quitas la ropa, que se rama el chocolate, uuuuuffff chocolate…chocolate…chocolate….
……………………………………un beeeeeeeso…Otro++++

2 comentarios:

  1. Tengo mis manos de caricias llenas para darte,

    los más apasionados besos tengo para ofrendarte,

    envuelta en una manta de rutilantes estrellas,

    me entrego a ti, para que rieles con ellas,

    viajes por el firmamento y grites tu voz al viento,

    qué todos los astros sepan, del amor que yo te tengo,

    que tú eres mi vida, que eres mi complemento,

    eres el ser que añoro con todo el sentimiento,

    qué aunque pasen los años, sin detenerse el tiempo,

    no dejaré de amarte, ni un segundo, ni un instante,

    permanecerás en mi mente, por siempre, eternamente.
    T. Q. OLINA

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  2. Nunca el efímero tiempo diluya
    Mis agarraderas en sierpes
    Pues a ellas sin miedos me asiría
    No hay sensibilidad cuan la tuya
    Sabes sobre mi silencio remediar
    Como nadie me conoces,me sabes
    Y me entregas cálidas aguas donde amar.
    Bsts.Olina.

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