Pecadoooor…es

Pecadoooor…es

Según un estudio de la real federación de mandatarios cabestros inocentes,(FMcI) digan que sí, los pobres son culpables de todo  los delitos contra la saciedad de los benefactores de la sociedad.

Sea pues tomados por los colgajos, en otros lugares huevetes, escrotos, testículos u otros utensilios que brindan dichos cuernúpedos por su ausencia, que al bravo siempre  se dijo a la arena y mucho jierro, que decía Don Pío.

Los pobres  Pecadoooores de cartera prieta han de mirar por su bien, porque los desmayados de hambre, son unos derrochones y se endeudan con lo que no tienen, y luego pasa lo que pasa, la que han liado, que parece que estamos en la Gran De Presión, el Crack del  veintinueve y ahí es donde con la iglesia hemos topado. Los ricos, no hijo no, ellos pecan pero nunca delinquen. 

Los delitos como dios manda, se crearon para los endeudados y desequilibrados señores que comen por dos, cuando no tienen ni para uno, joééé.

Y es que quién mejor que estos señores, de postín que cuidan esos arrecifes de las Caimán, que salvándolas matan dos pájaros de un tiro, islas preciadas y bichos peligrosos alejados.

No asustarse, si los moody, o los S&P, que conste que no es mi anagrama, que después pasa lo que pasa, que las mentes son muy egabrenses en fino, pues dicen que los bancos están mal, pues estarán mal, porque para eso son independientes y miran por el bien común de los esmirriados, así sea.

Además para evitar malos entendidos y demostrar que no hay realmente la necesidad de engañar a nadie, se ha pedido a un experto en medidas, del Centro Internacional de Pesas y Medias, para que marque la distancia entre ricos y pobres. Yyyyy qué esperaban, pues la propia realidad, sea una foto como muestra la misma, para corroborar el acercamiento brutal y parsimonioso entre ambos señores.

Y es que desde que me tocó la lotería, todo se ve más claro en el horizonte, totalmente despejado de guanaminos…Jejeje.

Pero cuando me vea pasear señor pastorriano no se me acerque para que coma de su mano, que sigo siendo de los que muerden, jejeje. Mejor ser dueño, aunque sea de nuestra hambre, a vendernos ante tamaña cabestrada.